Dentro de la I Biennal Lluï_Art del Col·lectiu Öbertament, se celebró el viernes 30 de noviembre una Jornada dedicada a la creatividad y la sanación a través del arte en Salud Mental. La Jornada se llevó a cabo en el Teatre del Raval de Gandia desde las 9:30 de la mañana inaugurando el acto Nahuel González, Concejal Delegado de responsabilidad social y políticas para la ciudadanía del Ayuntamiento de Gandía y José Cabanilles en representación del Col·lectiu Öbertament.
Comenzamos la jornada con una mesa redonda con María Bueno (artista), Luis Sáez ( Director artístico de Debajo del Sombrero) y Susana Blas (Redactora de Metrópolis, Consejera en MAV, Historiadora y Comisaria) como invitados. Nos hablaron de sus proyectos y experiencias en el mundo del arte outsider y mantuvimos un diálogo sobre temas que fueron desde la definición del arte outsider, hasta la implicación política de programar arte outsider o marginal en los centros de arte. Si este arte de los márgenes se define como un arte donde prima la autenticidad, la interioridad del artista, la emoción y la memoria, ¿es que no tiene todo arte estas características? ¿Es que tenemos que buscar el arte en los márgenes? Para Susana Blas, se debería llegar a una situación de normalidad en las programaciones de arte de los museos y centros de arte, en la que programar mujeres o artistas outsiders no fuera la excepción.
Seguimos con la conferencia de Lola López-Mondejar sobre los efectos terapéuticos de la escritura. Comimos una buena paella y continuamos la tarde con la conferencia a dúo de Ana Hernández y María Montero-Ríos del Master de Arte y Terapia de la UPV. Para acabar la sesión de trabajo, tuvimos un COLOCLOW maravilloso gracias a La Mar Salà, compañía de teatro, con Tufi (María Colomer) i Totocla (Carmen Rubio), que nos desmontaron los esquemas y nos hicieron reír y pensar.
Tras visitar la exposición de la Biennal, acabamos con la obra de teatro La onironauta de la Compañía de Teatro La Catrina, un viaje a la búsqueda de interpretadores de sueños, auténtico y honesto.
Buscamos y seguimos buscando porque de la mente humana sabemos menos que del universo que nos rodea. Somos un misterio insondable pero ante todo pertenecemos a la especie Homo Ludens y necesitamos la magia, la ilusión, la emoción y también, cómo no, el sacrificio que supone mostrarnos. El arte también es jugar con materiales de los que surgen objetos con los que nos sorprendemos a nosotros mismos y que, a veces, llamamos obras de arte. Quizá no deberíamos hablar de artistas sino de ojos y mentes abiertas que pueden ver la belleza que encierran esos objetos que nosotros mismos creamos y el grito de libertad que suponen.
Este encuentro nos ha servido para establecer vínculos y líneas de trabajo, también para crecer en red de amigos, buscar sinergias y ayudarnos mutuamente a hacer visible este arte que llamamos outsider, brut, cru… y sin etiquetas.